Metamorfosis

HyperDisruptiveMillennial
3 min readJan 29, 2021

--

“Llega un día en que dices: ¡basta!, en que el despertar es lo más chingón de la vida, cuando meses atrás, te cagaba que el sol diera por tu ventana y que hacías hasta lo imposible para quedarte más tiempo en la cama.

Llega un día en que te ves al espejo y te maravilla el tono de tu piel, las curvas de tus glúteos y las piernas torneadas, que aunque a veces quisieras reafirmar la cintura o tener más tonificados los brazos, el reflejo de lo que ves, te encanta de cierta forma, que quieres hacer mil y un cosas para tener el cuerpo más bonito y que no te vas a detener hasta conseguirlo.

Llega un día en que te quieres comer al mundo, de una manera más intensa que como lo hacías antes, que se te vienen a la mente todos los viajes que faltan, las aventuras que vienen y cada momento, que necesitas que queden plasmados en tus recuerdos. Que has decidido ya no postergar nada, ni dejarlo para mañana, porque no hay tiempo para segundos intentos y que es mejor hacerlo cuando se pueda, que estar esperando a que la vida, te ponga en el camino, entiende: tú creas el destino.

Llega un día en que todo lo sufrido, lo cuentas tan quitada de la pena, porque aunque el corazón haya quedado lastimado, sigue habiendo más y más latidos, para poder crear historias nuevas, para enamorarte mil y un veces, hasta que realmente llegue alguien que sea el bueno, que no te suelte, que te vea como la maravilla que eres y para que juntos, escriban todo un libro completo de amor del bueno y de pasión intensa.

Llega un día en que, analizas que todo ese insomnio, que todas esas dudas y estar de cierta forma, paralizada unos cuantos meses, han servido para comprender más la vida, transformar varias cosas, consolidar de cierta forma, esas metas y sueños, que siguen estando pendientes y que sepas que tus alas, están más que listas, para emprender el vuelo y no irte nunca más en picada.

Llegó el día, en que las lágrimas, los gritos, la desesperación, la impotencia y las nulas ganas de vivir, se encapsularon en un capullo, que poco a poco, se fue moldeando con todo eso bonito, que te habías imaginado y que seguías anhelando que pasara. Que poco a poco, esos malos pensamientos, se fueron drenando y dieron paso a una fusión de amor por la vida y de alegría a la misma, que han sucumbido hasta lo más adentro de tu ser, dando paso a una transformación que ni tú misma imaginabas. Porque ya es momento de nuevamente emprender el vuelo, más lista, más peligrosa, más precavida, pero sobre todo, con toda la pasión que te caracterizaba y que en teoría, esa esencia de mujer intensa y liberal, no se ha borrado, ni se borrará”.

--

--